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Etiqueta: economía familiar

  • Corporativo

    Rogelio Varela-

    Sinaloa se sube al Sistema de Infraestructura de la Calidad a través de un convenio con la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA).

    Residuos por despensas

    Ya le he comentado que en los últimos años se reportan avances importantes en la cultura del reciclaje, y lo relevante ha sido involucrar a la sociedad.

    Buena parte de esos avances se debe a la gestión de la asociación civil sin fines de lucro Ecología y Compromiso Empresarial (ECOCE) que lleva Carlos Sánchez que ha empujado fuerte la educación ambiental y manejo adecuado de los residuos como son envases y empaques reciclables.

    Una iniciativa exitosa de ECOCE ha sido el programa Acopio Móvil que en los últimos años ha permitido recolectar más de 600 mil kilos de materiales que para que tenga una idea de su relevancia representan el ahorro de agua equivalente a llenar 383 pipas de agua.

    Se trata de un programa que canjea a las familias sus envases y empaques posconsumo por productos de despensa, lo que por un lado permite mostrarles el valor que tienen sus residuos canalizarlos para su reciclaje, y a la vez apoya a la economía familiar con productos de consumo como arroz, aceite comestible, azúcar, tortillas de harina, atún, mayonesa, papel higiénico, avena, frijoles refritos, refrescos, galletas, sal, agua purificada, sopas de pasta, jugos y consomé de pollo, entre otros.

    El canje se realiza en diferentes espacios públicos donde se reciben los residuos de envases y empaques separados por tipo de material, y de acuerdo con su peso en kilos los beneficiarios pueden canjearlos por despensas lo que de paso fortalece la separación de residuos inorgánicos y promover el reciclaje.

    Los materiales que se pueden canjear son PET, como las botellas de agua, refrescos y envases de mayonesa; empaques flexibles metalizados y no metalizados, como bolsas de botanas, galletas, pan de caja, pan dulce y sopas de pasta; envases de plástico rígido (PEAD), como los que contienen leche, jugos y productos de limpieza; envases de aluminio, como los de refrescos y cervezas; así como latas de hojalata, como las empleadas para contener el atún, conservas y otros alimentos.

    La ruta del dinero

    La que da pasos firmes en beneficio del Sistema de Infraestructura de la Calidad, es la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA), que preside Mario Gorena, pues concretó un convenio con la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), representada por el rector Jesús Madueña, cabe resaltar que esta casa de estudios se mantiene a la vanguardia al certificar Sistemas de Gestión de Calidad y en organizaciones educativas conforme a las normas ISO 9001 e ISO 21001. Y no se descarta que a futuro acredite a sus laboratorios de ensayo y calibración, sin duda esto le permitirá dotar de productos, procesos y servicios técnicamente competentes en beneficio de la sociedad, de empresarios sinaloenses y de la región. El estado de Sinaloa cuenta con 52 laboratorios de ensayo y calibración, 7 laboratorios clínicos, 4 gabinetes de radiología e imagen, 80 unidades de inspección y 2 organismos de certificación, entre otras áreas, acreditados por EMA.

  • Inversión como factor de crecimiento

    Por: Agustín Vargas

    • Recesión, más no crisis
    • Fundamental mejorar el ambiente de inversión
    • Bienestar de la población, a largo plazo

    A principios de marzo del año pasado advertíamos sobre las dificultades que tendría la economía mexicana para su recuperación y el lento crecimiento que se tendría en todo el 2021. Todo apuntaba en ese sentido y nada o casi nada hicieron las autoridades para evitar un mayor deterioro de la economía familiar, la economía real.

    De esta forma, el año de la supuesta recuperación se quedó corto. La economía mexicana creció un 5% en 2021, tras desplomarse un 8.2% en 2020 por el impacto de la pandemia. El país, además, entró en recesión técnica al cierre del año, al sumar dos trimestres consecutivos con retrocesos.

    Políticas contracíclicas tímidas y menos oportunas, rezagos estructurales y problemas de incertidumbre para la inversión estuvieron detrás de la mayor caída y de las perspectivas de una recuperación esperada más lenta para México.

    Las debilidades estructurales, los problemas de inconsistencia temporal y la persistencia de un entorno de incertidumbre para la inversión enmarcan un débil punto de partida para el crecimiento de la economía mexicana en el largo plazo.

    En el último trimestre del año pasado la economía sufrió una contracción de 0.1%, según datos preliminares anunciados el lunes pasado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

    De esta manera, la economía sumaría dos trimestres seguidos con cifras rojas, con lo cual, de acuerdo con los especialistas, la economía mexicana entró en una recesión técnica, aunque justo es aclararlo esto no significa que México haya entrado a una crisis económica de grandes dimensiones.

    La crisis, con todas sus letras, significa un profundo debilitamiento de los principales indicadores macroeconómicos como, por ejemplo, el empleo, el nivel de precios, el consumo interno, la capacidad de pago de los agentes económicos o el nivel de producción.

    En ese sentido, la crisis económica no sólo incluye un crecimiento bajo o negativo, sino que además implica una alta inestabilidad financiera.

    México no está en una crisis, pero tampoco está pasando por un buen momento tras las secuelas económicas que ha dejado la pandemia y la adopción de erróneas políticas económicas que desincentivan la inversión.

    Las disrupciones en las cadenas de suministro, la cuarta ola de covid-19, la alta inflación, los efectos de una nueva legislación en materia de subcontratación y la incertidumbre entre los empresarios son algunas de las razones que explican el frenazo económico.

    En 2021 el Producto Interno Bruto (PIB) del país creció 5%, un paso adelante, pero al mismo tiempo una recuperación insuficiente para compensar la profunda caída del 8.4% en 2020.

    Bienestar, a largo plazo

    De acuerdo con las estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), en 2021 el PIB se encontrará casi 5.0 puntos porcentuales por debajo de su nivel pre Covid-19, y sólo hasta 2024 alcanzará nuevamente el punto de partida previo a la pandemia.

    En términos de PIB per cápita, es decir los ingresos de la población por individuo y por ende su bienestar económico, la recuperación se logrará hasta 2026, mientras que en EU se alcanzaría en el 2021, es decir, cinco años antes. Bajo las previsiones de crecimiento del grupo financiero BBVA para México, el panorama es aún más sombrío, con el PIB per cápita recuperándose hasta 2029.

    A diferencia de México, otras economías latinoamericanas mostrarán una mejor evolución de la actividad económica en el largo plazo.

    El FMI estima que en 2025 el PIB per cápita de Chile superará su nivel pre Covid en 8 puntos porcentuales, mientras que el de Brasil será 5.0 puntos mayor.

    En ese mismo año, el PIB per cápita de México aún se encontraría por debajo de su nivel pre pandemia (99% del nivel registrado en 2019).

    Si bien todas las previsiones de crecimiento están sujetas a cambios y revisiones, constituyen un punto de referencia en cuanto anticipar la evolución futura de la actividad económica y permiten realizar comparativos a nivel internacional.

    En conclusión, atender los rezagos estructurales y mejorar el ambiente de inversión, son los retos fundamentales para mejorar las perspectivas después de la pandemia.

    En el largo plazo, el entorno para la inversión será un factor determinante para la actividad económica; fomentar políticas públicas que promuevan el Estado de Derecho y la certidumbre jurídica en contratos será clave para impulsar el crecimiento potencial de la economía.

    La importancia de la inversión como factor de crecimiento no es sólo su contribución contemporánea al PIB, sino también su papel como detonante de crecimiento en el largo plazo.

  • Buen Fin 2020 será el más largo desde su lanzamiento

    Secretaría de Economía / Secretaría de Turismo

    Comunicado Conjunto

    Del 9 al 20 de noviembre se realizará la décima edición de El Buen Fin

    • Se busca apoyar a la economía familiar, incentivar la actividad del mercado interno e impulsar la formalidad.
    • La secretaria de Economía, Graciela Márquez, subrayó los aspectos fundamentales sobre salud y economía para esta edición.
    • El secretario de Turismo, Miguel Torruco, indicó que coincidirá con un fin de semana largo, que generará una ocupación hotelera de 44%, con una derrama económica de 2,189 millones de pesos.

    Del 9 al 20 de noviembre próximo se llevará a cabo la décima edición de El Buen Fin, programa instrumentado por diversas dependencias del Gobierno Federal y la iniciativa privada para apoyar a la economía familiar, incentivar la actividad del mercado interno y acrecentar la formalidad por medio de promociones y reducciones significativas en los precios de diversos bienes y servicios.

    El anuncio fue hecho en conferencia de prensa virtual en la que participaron la secretaria de Economía, Graciela Márquez; el secretario de Turismo, Miguel Torruco Marqués; el subsecretario de Industria, Comercio y Competitividad de la Secretaría de Economía, Ernesto Acevedo Fernández; el procurador Federal del Consumidor, Ricardo Sheffield Padilla; el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Carlos Salazar Lomelín; el presidente de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales, Vicente Yáñez; el presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo, José Manuel López Campos; el presidente de la Asociación Mexicana de Venta Online, Eric Pérez-Grovas; el director general del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado, Carlos Hurtado López y el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión, José Luis Rodríguez Aguirre.

    También estuvieron presentes Claudia Rivera, del Servicio de Administración Tributaria; Juan Carlos Jiménez, de la Asociación de Bancos de México y Philippe Boulanger, de la Asociación de Internet MX.

    La secretaria Graciela Márquez dijo que los ajustes más importantes a El Buen Fin salvaguardan la salud de los consumidores, de los trabajadores y de todos aquellos que participan de manera presencial. Comentó que la modificación más importante es la duración del Programa, que pasó de los tradicionales cuatro días a 12.

    Reiteró el llamado a evitar aglomeraciones que provoquen un riesgo a la salud, ya que habrá más días de ofertas. “Contamos con el apoyo de las empresas adheridas al Programa para lograr la aplicación impecable de las restricciones en los aforos que señalan las autoridades locales, estatales y federales en materia de salud”.

    El secretario Miguel Torruco Marqués indicó que después de la caída que provocó en la actividad turística la aparición del COVID-19, hoy la perspectiva es positiva, ya que desde junio se inició una recuperación en el sector que se prevé continúe gradualmente hasta el cierre de año.

    Añadió que El Buen Fin coincidirá con el fin de semana largo en que se conmemora el aniversario de la Revolución Mexicana, lo que dará un impulso adicional a la industria del turismo.

    En este periodo de asueto, dijo, se estima la llegada a centros vacacionales de alrededor de 1,735,000 turistas, los cuales generarán una ocupación hotelera de 44.3%, y una derrama económica por hospedaje de 2,189 millones de pesos.

    El subsecretario Ernesto Acevedo comentó que la Secretaría de Economía reconoce que la pandemia también trae oportunidades que deben ser aprovechadas. Por ello insistió que, además de procurar un éxito comercial del Programa que sirva para la recuperación económica, se deberá garantizar su éxito sanitario.

    “El Buen Fin de 2020 también servirá para que entre todos construyamos una nueva normalidad, en donde los eventos comerciales sean exitosos en términos económicos y sanitarios”, dijo Acevedo.

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